Cómo comunicar los resultados de la investigación

En el anterior número, nos introdujimos en una de las actividades más importantes de la investigación que es la difusión de los resultados. Sólo una buena difusión garantiza la aplicabilidad de nuestros resultados y la posibilidad de ampliar una línea de investigación, tomando como referencia nuestro estudio. Si en el anterior capítulo se ofrecían pautas para la elaboración de resúmenes para una comunicación científica o para la redacción de un artículo original, en esta ocasión, vamos a proponer algunas pistas para franquear con éxito la presentación de los resultados de nuestro trabajo frente a un auditorio de investigadores.

La presentación de nuestra investigación en un foro científico puede adquirir diversos formatos, entre los que destacan la comunicación oral o la comunicación mediante póster. Cualquiera de estos formatos puede convertirse en el ensayo ideal de una presentación de un artículo original. No en vano, los resultados de nuestra investigación serán escuchados y, con suerte, discutidos, por un auditorio especializado, lo que puede constituir una primera revisión de los mismos. Además, la estructura de la presentación de estos resultados en cualquiera de sus formatos suele ser similar a la de un artículo original, por lo que el borrador del mismo puede quedar avanzado en este tipo de presentaciones.

No obstante, el tiempo limitado de la presentación y la dificultad de algunos formatos para captar el interés de los expertos que asisten a un evento científico son algunas de las limitaciones más importantes a este respecto. Por ello, debemos cuidar al máximo nuestra presentación.

La comunicación oral
El auditorio que va a recibir el mensaje de nuestra comunicación es la clave principal del éxito de nuestra presentación. Es necesario conocer el tipo de personas a las que va a ir dirigido el mensaje, para hacer llegar una información coherente con las expectativas de dicho auditorio. En la mayoría de los eventos que se celebran actualmente, se produce la exhibición simultánea de varias mesas de comunicaciones, por lo que debemos contar con la libertad del asistente para elegir nuestra sala, bien por la temática del conjunto de las comunicaciones, bien porque le llame la atención algunos de los títulos que se proponen.

El título de la comunicación oral se convierte, por tanto, en el primer cebo para captar a nuestro auditorio. En primer lugar, no debemos olvidar que el foro en el que se va a producir nuestra exposición es un evento científico. Esta norma sirve como regla general para cada uno de los aspectos que revisemos a continuación. La formalidad de la presentación debe quedar garantizada, por lo que suelen resultar poco exitosos los artificios técnicos, más propios de la ficción cinematográfica. No obstante, la formalidad no está reñida con el ingenio; así que, queda a la creatividad del ponente encontrar un titular claro, concreto y conciso, que, al tiempo que ofrece una información veraz sobre el contenido de la comunicación, resulte atractivo en sus términos.

El espacio en el que va a tener lugar nuestra comunicación resulta también importante, porque, si bien, las salas pequeñas acogen a un aforo limitado, que puede reducirse aún más si se produce la simultaneidad de mesas de comunicaciones, las ventajas del control de este tipo de espacios siempre son mayores que cuando la comunicación debe ser pronunciada en un salón amplio. Sin duda, los elementos técnicos serán diferentes en una y en otra, pero la diferencia fundamental estriba en que en el aumento de capacidad de estos salones, que permiten la asistencia de un mayor número de congresistas. El riesgo que se corre es que no sean precisamente todos expertos en el tema abordado y la discusión, si existe, sea poco productiva. La correcta actuación del moderador de la mesa, animando a la participación o limitando las intervenciones, suele ser la mejor baza con la que cuente el ponente. Claro que el mayor temor se produce por la falta de asistencias: en una sala grande, los sitios vacíos se notan más que una sala pequeña.

El tiempo de la presentación es otro de los elementos centrales a tener en cuenta por el orador y su incumplimiento suele ser la causa de la mayoría de los fracasos en la transmisión del mensaje y del enfado de los congresistas y el moderador, que asisten a la exposición con distinto grado de implicación. La mayoría de las comunicaciones tienen un tiempo señalado de entre 10 y 15 minutos, tiempo que tiende a reducirse en los últimos años. Por ello, debemos enviar un mensaje escueto y directo al auditorio, con un par de ideas clave que funcionen como eje de un discurso que debe estar perfectamente escrito y cronometrado con antelación.

Para poder comunicar los resultados de un estudio llevado a cabo, es necesario, en primer lugar, disponer de dichos datos. Resulta poco honesto enviar un abstract a un congreso que luego se corresponda escasamente con los resultados comunicados. No obstante, si los investigadores han avanzado en el estudio en los meses posteriores al envío del resumen, siempre es posible introducir una línea final en la exposición que permita al auditorio observar la evolución del trabajo presentado.

La estructura del mensaje es la misma que la de la elaboración de un artículo científico –introducción, método, resultados y discusión-, con la excepcionalidad de que el tiempo de que se puede disponer es mucho menor. Por ello, es importante centrar nuestra comunicación en los resultados obtenidos, después de una breve introducción que justifique la necesidad de nuestro trabajo y haga referencia a los objetivos concretos de nuestra investigación. Las referencias a lo que otros investigadores hicieron anteriormente respecto de nuestro tema de estudio pueden quedar reflejadas en la discusión con los datos que hemos obtenido en nuestra investigación.

La exposición debe crecer desde la introducción hasta las conclusiones de nuestro estudio, terminando con una frase o idea-fuerza, que sirva de resumen y aliente la discusión posterior. La distribución de los apartados de la comunicación no sigue unas pautas estandarizadas, dada la diversidad en el tipo de diseños posibles de investigación. Pero resulta imprescindible para garantizar el éxito de nuestra intervención el ensayo previo, que garantice la distribución del tiempo y los aspectos no verbales de la comunicación.

En cuanto a los aspectos no verbales, resulta de gran trascendencia reconocer las características de la ansiedad o del miedo a hablar en público de los oradores noveles, con el fin de paliar las posibles limitaciones que puedan causar en nuestra comunicación. El ensayo, de nuevo, delante del espejo o delante de otros colegas, la disposición del texto íntegro de la comunicación (incluidos los agradecimientos), la revisión de los medios técnicos, son las mejores estrategias para evitar que dicha ansiedad pueda convertirse en un enemigo a la hora de cumplir con el tiempo previsto, hacer llegar el mensaje con claridad o dar una respuesta clara a cualquier participación de los asistentes.

Por último, la elección de un atuendo acorde con el estatus del evento científico al que asistimos, que permita garantizar, a su vez, todos los aspectos relacionados con la comodidad del ponente –movilidad, seguridad, temperatura- es una de las claves finales, para asegurar una presentación exitosa.

Los soportes audiovisuales de apoyo
El uso cada vez más extendido de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC) ha producido una revolución en la elaboración de soportes audiovisuales de apoyo a las comunicaciones orales. Lejos quedan ya las trasparencias y las diapositivas que había que elabora con antelación suficiente, para disponer de ellas en el momento de nuestra partida para asistir al congreso. Las TIC nos permiten, en la actualidad, modificar nuestra presentación con escasa antelación al momento de la intervención.

Los programas para presentaciones de que disponen las grandes marcas de distribución de software suelen utilizarse de forma mayoritaria en los eventos científicos actuales. La facilidad de su uso y la incorporación de sistemas de ayuda en los propios programas han permitido la universalización de su uso y permiten una gran calidad en la presentación. PowerPoint® o CorelDraw® son dos de los programas más utilizados, teniendo una mayor primacía el primero sobre el segundo.

La personalización de la presentación es una de las principales consecuencias de la flexibilidad de estos productos, pero hay que evitar que nuestra libertad creativa pueda contribuir a la distracción de los asistentes. El abuso de los soportes tecnológicos puede menguar el interés hacia el estudio que presentamos, haciendo caer nuestra presentación en la exhibición gratuita. El uso de colores chillones, de efectos visuales o sonoros en la transición de las diapositivas o la sobrecarga de objetos de la diapositiva suelen ser criticadas como de mal gusto por la comunidad científica y puede llevar a la infravaloración del fondo del trabajo presentado.

La presentación, por tanto, debe ser contenida, aunque atractiva en su presentación. Para ello, debemos tener en cuenta la iluminación de la sala, para utilizar un fondo oscuro con las letras claras que favorezcan el contraste y, por tanto, su visibilidad, si la sala no dispone de ninguna iluminación exterior; o utilizar un fondo claro, con las letras oscuras, si la sala dispone de luz exterior, o no se apagan todas las luces de la sala.

El tamaño de la letra también es fundamental, para evitar la saturación de la diapositiva que dificulta su lectura. No se deben rebajar los 28 p en el formato de la letra del texto en el cuerpo central, para garantizar su visibilidad por el auditorio. Esto implica, además, una labor de síntesis previa, para evitar forzar las diapositivas. El número de diapositivas debe ajustarse, además, al tiempo concedido para la presentación. Un número elevado de diapositivas obligará al orador a pasar rápidamente por algunas de ellas, con el consiguiente malestar del público asistente, que, al no disponer de tiempo para leerlas, no sabe si se está perdiendo alguna información de interés.

El uso de enlaces en las presentaciones debe ensayarse con antelación, para evitar que un hipervínculo realizado en nuestra presentación con algún sitio web no esté correctamente enlazado o la presentación no esté disponible. Para ello, es necesario garantizar la conexión del sistema desde donde se va a proyectar dicho enlace a la red. En el caso de presentaciones con sonido incorporado, es igualmente necesario asegurarse con antelación de la existencia de un sistema de amplificación del sonido y de la calidad del mismo para su emisión.

Elaboración de un póster
La presentación en formato póster es una de las fórmulas habituales en la mayoría de los eventos científicos. No es la calidad del trabajo presentado o la abundancia de las propuestas hechas llegar al comité científico la causa de la elección de este formato. En ocasiones, el formato del propio congreso en cuanto a su extensión y medios disponibles obliga a la selección de algunas comunicaciones para ser presentadas en formato póster.

La mayoría de las recomendaciones apuntadas más arriba para las comunicaciones orales tienen igual vigencia en lo que a las presentaciones de póster se refieren. Esta coincidencia viene dada, porque la estructura de la presentación debe ser similar e incluso los medios técnicos que se utilizan para la elaboración del póster son idénticos que los usados para los soportes de apoyo a la comunicación oral.

En la preparación del póster es necesario seguir las instrucciones del comité organizador del congreso en el que se presenta. La restricción en cuanto al formato suele ser el principal condicionante para la elaboración de un póster. El espacio de que dispone la organización para su exhibición y la necesaria homogeneidad entre los carteles exhibidos implica que se admitan trabajos en formato vertical (se puede consultar a la organización acerca de la necesidad de utilizar otros formatos), con unas dimensiones que oscilan entre los 100 y los 120 cm. de altura y los 70 a 90 de ancho.

Otras restricciones quedan a criterio del comité organizador, por lo que deben ser consultadas por el autor antes de proceder a la elaboración de su póster. Existen numerosas páginas web, institucionales y personales, que ofrecen apoyo, e incluso plantillas de uso libre (como la del grupo Investén del Instituto de Salud Carlos III), para facilitar el trabajo de diseño del póster.

Para favorecer la eficacia de nuestra presentación del póster, debemos tener en consideración alguno de los factores del diseño:
- Distribución de los elementos dentro del póster atendiendo a los criterios de atracción del asistente y evitación de excesos gráficos.
- El contraste del color del fondo con el del texto: destaca más el negro o azul marino sobre un fondo blanco o amarillo, mientras que la combinación del rojo con el verde o el negro suelen resultar poco legibles.
- Uso de las tablas, gráficos y figuras: Es imprescindible obtener el permiso para el uso de ilustraciones o fotografías de otros autores. La colocación y la calidad de las ilustraciones son también fundamentales a la hora de garantizar el éxito de un póster.
El póster requiere normalmente de la presencia del investigador en los tiempos marcados por el comité organizador, para la explicación de la información mostrada (esto no debería ser imprescindible, el póster debe hablar por sí mismo) y para favorecer la discusión con el resto de los asistentes. Se suele utilizar el espacio en el que se llevan a cabo los descansos para tomar café y se simultanea la charla alrededor de los carteles con la ingestión de pequeños refrigerios.

Otras formas de presentación de los resultados de investigación
La extensión de la red de redes, internet, ha producido un movimiento de cooperación en lo que a la transmisión de todo tipo de contenidos se refiere. A este fenómeno, no ha escapado la difusión de los resultados de la investigación, si bien, hay que considerar la posibilidad de uso sin permiso, incluso modificación de alguna de la información remitida a través de este soporte. Las posibilidades de proteger nuestro trabajo frente a posibles plagiadores o frente a la modificación de su contenido han crecido con el uso de programas cada vez más completos.

Otro asunto que hay que atender es la limitación que establecen los derechos de autor, si nuestro trabajo ha sido publicado en alguna revista científica. Normalmente, sin embargo, es posible publicar una ficha técnica del trabajo, que incluya nombre de los autores, título, resumen y fuente en la que ha sido publicado, con un enlace a dicha publicación, para garantizar estos derechos.

as demostraciones en video o las transmisiones en directo son otros de los soportes empleados para la difusión de los resultados de una investigación. En muchas ocasiones, los datos recogidos en el transcurso de nuestro estudio han sido grabados en estos soportes y muchos investigadores consideran que son el mejor medio para contribuir a la comprensión de los mismos. Garantizar las condiciones técnicas y la calidad de las grabaciones y de los aparatos a través de los cuales se van a difundir estos resultados es una de las tareas del investigador.

En ocasiones, incluso la poesía es un medio para difundir los resultados de una investigación, como la llevada a cabo por la profesora de la Universidad de Toronto, Denise Gastaldo, junto con la red Inmigrant Women´s Health Promotion Project:
Immigration is like entering a bridge
When you get onto a bridge, you know there is an
entrance and an exit
My problem is that I got onto the bridge,
However, I don´t know whether I am at
The beginning, the middle
Or the end of the bridge
(Extracto de The Bridge)

Bibliografía
- Fuentelsaz Gallego C, Pulpón Segura AM, Icart Isern MT. Elaboración y presentación de un proyecto de investigación y una tesina. Barcelona: Publicacions i Edicions UB; 2001.
- Gastaldo, D (Ed). I´m Not the Woman I Used to Be: 30 Poems by Recent. Immigrant Women. Toronto: Women´s Health in Women´s Hands Community Health Centre; 2004.
- Gómez Barrena E. Redacción y presentación de un trabajo científico. Medios audiovisuales. En: Rodríguez Montes JA. coordinador. Bases de la investigación en Cirugía. Madrid: Editorial Universitaria Ramón Areces; 2005. p. 203-214.
- Instrucciones para la selección y preparación de una presentación en póster. Disponible en: http://www.isciii.es/htdocs/redes/investen/miscelanea_ayuda.jsp
- Limia Redondo S, Salvadores Fuentes P. Presentación eficaz de pósters. Metas enferm. 2002; (48): 20-24.
- Web Médica de Rafa Bravo. Instrucciones para autores. [en línea] [fecha de acceso 4 de julio del 2000]. URL disponible en: http://www.infodoctor.org/rafabravo/escribir.htm

FUENTE: http://www.nureinvestigacion.es